#27913
Fernanda Torres P.
Participante

La incomodidad es parte de nuestro instinto y es una alerta para saber que algo no está bien. Las mujeres somos acosadas desde pequeñas, en el colegio, en nuestros primeros lugares de trabajo (y digo primeros porque en esos momentos no lo identificamos como acoso, solo algo nos incomoda) en la universidad, en la calle, en la discoteca, en el transporte público, incluso muchas en sus propias casas.
Ya muchas levantamos la voz y ponemos un limite porque hemos tenido acceso a las herramientas (como este curso) para reconocer e identificar el acoso, el irrespero por parte de los hombres, algunos sienten verguenza, otros entran en negación, a otros les molesta que les pongamos un límite pero todo parte de la bendita INCOMODIDAD.